¿Para qué tienes tiempo?

El tiempo es irremplazable, cada segundo qué pasa es un segundo menos; no puedes comprar más y robárselo a los demás no significa que tu tiempo ha aumentado. 

Vivimos cada día como si fuéramos eternos, dejamos las cosas para "otro día con más calmita" y no valoramos el tiempo de los demás. No nos da tiempo de hacer las cosas que realmente importan por hacer cualquier otra que nos ayude a perderlo. ¿A quién se le ocurrió que está bien llegar media hora tarde a una cita? No es cultural, es respeto por la otra persona. Si pudiéramos ver una linea del tiempo de la humanidad y lo que ocupamos en ella, veríamos que estamos aquí solo un instante y las decisiones más importantes tienen que ver con cómo usamos ese instante o como hacemos que otros lo pierdan.

Quiero hablar de puntualidad, de la poca importancia que se le da a esa pequeña promesa de la hora de reunión. Es justo usar mi tiempo para rascarme la panza porque al final es mi vida pero no es justo robarle tiempo a otros por estarme rascando la panza. Somos lo suficientemente inteligentes como para prevenir cualquier contratiempo pero preferimos usar esa inteligencia para inventar las excusas que usaremos cuando lleguemos tarde. Un día, alguien dijo que la impuntualidad era cultural; mejor hagamos del respeto por el tiempo del otro algo cultural.

Si le diéramos la importancia debida al tiempo, los sueños no tardarían tanto en cumplirse.

Cada instante es valiosos y siempre lo puedes invertir para lograr lo que te propongas, se consciente de ti y de cuanto tiempo usas para trabajar por tus sueños. Ojo, muchas veces pensamos, pensamos y pensamos tanto que nos cansamos y estresamos como si hubiéramos resuelto la hambruna del mundo cuando en realidad no hicimos nada. Deja de darle vueltas al asunto. Planea y haz. Usa el tiempo, créeme que lo tienes a tu favor solo debes ser consciente de él.

By: Fernanda Hervias