Abre la ventana

Nuestros ojos son como ventanas que nos permiten ver una realidad única en el mundo y que, cuando convive con la de otros, se transforma. Estamos en constante cambio.

Date por enterada de que la forma en que ves al mundo no la tiene nadie más y esa es tú ventaja. Pero todos tenemos esa pequeña ventaja que nos hace especiales; cuando creemos tener la razón cerramos esa ventana para que otros pensamientos no se mezclen con los nuestros, sin embargo, abrir nuestra ventana significa expandir nuestro horizontes. Aprender. Ver más allá.

Escuchar lo que otros tienen que decir no significa cambiar forzosamente lo que pensamos porque tenemos ese filtro llamado poder de decisión que nos da la oportunidad de moldear nuestra mentalidad de mil maneras diferentes. 

Tú decides lo que toleras, lo que rechazas y en donde pintas tu línea.

Y esta decisión de qué dejas entrar y qué no depende de la persona en la que te quieras convertir. Vemos a través de ventanas y de nosotros depende ir rompiendo (o no) las paredes que tapan el panorama. No está de más decir que también vemos a las personas a través de ventanas y ellos a nosotros también. Si aprendiste algo nuevo sobre algo o alguien: felicidades, acabas de romper un pedazo de esa pared. 

By: Fernanda Hervias